Tras la vuelta del verano estamos pudiendo constatar que la situación de la pandemia no mejora. El equipo sigue manteniendo muy atento para cumplir todas las normas que las autoridades sanitarias nos recomiendan. Tenemos actualizado nuestro plan de contingencia y hemos aprendido de la experiencia.
Es necesario mantener a los equipos profesionales y mujeres motivados y conciencias para que el cansancio no nos haga descuidar las medidas básicas: mascarilla, distancia, lavado de manos. Junto a ello y siguiendo las indicaciones de la Dirección General de Igualdad de la Comunidad de Madrid mantenemos distintos protocolos, stock de EPIs, políticas de teletrabajo etc.
Es un tiempo para el que nos tenemos que proveer sobre todo de mucha paciencia. No sólo la situación epidemiológica se agrava, sino también la situación personal de las destinatarias, que como colectivo especialmente vulnerable, es de los que más sufre cuando el contexto social y económico se deteriora.
Somos conscientes de la necesidad de atender y actualizar nuestra intervención en este nuevo contexto. En el corto plazo, con las medidas sanitarias y en el medio y largo plazo, cuando emerjan las secuelas de toda la parte social y económica de la crisis.
Seguimos cuidándonos en lo personal y en lo colectivo, con responsabilidad individual y solidaridad colectiva, interviniendo y reivindicando, para que la pandemia no nos lesione ni la salud ni ningún otro derecho.