La otra cara de la Trata. ACCEM
Informe diagnóstico sobre otras formas de trata que afectan a las mujeres
El objetivo general del presente informe es aportar conocimiento sobre la situación en España de las otras formas de trata diferentes de la sexual (o la sexual junto a otras formas) que afectan a las mujeres. Este objetivo general se ha desglosado en los siguientes objetivos específicos; cada objetivo se acompaña de sus hipótesis.
- Conocer la experiencia de los y las profesionales que intervienen directamente en la atención de mujeres víctimas de trata con otros fines de explotación en España.
Hipótesis1. El éxito de la intervención legal y psicosocial con víctimas de trata depende, no solamente de la formación y empatía de los profesionales implicados, sino también de un contexto socio-jurídico que entorpece la protección efectiva de las víctimas. - Analizar la normativa, protocolos, políticas y prácticas de identificación, así como los mecanismos de protección y asistencia de las víctimas de trata en España.
Hipótesis 2. La actual legislación en materia de extranjería y los rígidos protocolos de identificación revictimizan a las mujeres víctimas de trata de seres humanos, obstaculizan su regularización administrativa en España y, por consiguiente, dificultan su recuperación e integración en la sociedad de acogida. - Conocer y visibilizar las experiencias de las mujeres víctimas de trata con otros fines de explotación en España.
Hipótesis 3. La situación de las mujeres víctimas de trata con otros fines está muy invisibilizada en nuestro país y no se produce una reparación real de las mismas una vez fuera de las redes de trata.
Conclusiones
La trata de seres humanos, independientemente de su finalidad, es un delito muy grave que vulnera los derechos humanos y que se nutre de la ambición y la desigualdad. La mayoría de las víctimas, procedentes de áreas socio-económicos muy deprimidas, son engañadas durante la captación con falsas promesas de trabajo y/o estudios en el país de destino. Sin embargo, la diversidad de perfiles hallados revela que no hay una regla exacta que defina el modus operandi de las redes de trata ni la reacción de las propias víctimas. En muchas ocasiones, una filosofía paternalista conduce a la concepción de las mujeres como seres frágiles y manipulables, que necesitan ser rescatadas pasivamente de las fauces de las mafias. Un enfoque empoderante permite analizar la situación de la trata poniendo el foco en las capacidades de resistencia de las mujeres, sin por ello anular su condición de víctimas y los derechos de asistencia y reparación de los que deben disponer.
Madrid. 26 de noviembre de 2019. Presentación del informe de ACCEM. la otra cara de la Trata. De izquierda a derecha: Carmen Martínez Raposo de la Fundación Cruz Blanca, Enrique López Villanueva del CITCO, punto focal contra la trata de la Relatoría Nacional, Marta González Manchón, Coordinadora de Sensibilización de Proyecto ESPERANZA, Beatriz Sánchez, Fiscal adjunta al fiscal de sala de Extranjería, Teresa de Gasperis de ACCEM, Raquel Benito de Cáritas y José Nieto de la Policía Nacional.
Cada situación de trata es diferente de cualquier otra, aunque muchas de ellas compartan algunas de las principales características en común. Hay mujeres en condiciones de vulnerabilidad que se aferran a un clavo ardiendo con tal de huir de la violencia que atraviesan en sus países. Mujeres valientes con sueños férreos, dispuestas a cruzar continentes enteros hasta conseguirlos. Mujeres que conocen la explotación a la que van a ser sometidas y consienten, como única vía de escape a la miseria. Mujeres seducidas o estafadas, pero no por ello menos fuertes y resilientes.
Por supuesto, la persecución del delito es una parte imprescindible en la lucha contra esta lacra, pero no se trata simplemente de “salvar” a estas personas de la explotación, como si fueran meros agentes pasivos. Se trata de educar a la ciudadanía en la empatía y el consumo sostenible; de escuchar activamente a las supervivientes y facilitarles las herramientas necesarias para su restablecimiento e integración; de diseñar planes eficaces para combatir la trata; de modificar las políticas racistas que criminalizan y desamparan a las víctimas. La adopción de un enfoque de derechos por delante de un enfoque de necesidades, permite restablecer a las mujeres en cuanto a víctimas y a dotarles de dignidad en cuanto a seres humanos, protegiéndolas de la explotación y de la revictimización de los procedimientos de identificación, al mismo tiempo que se les ofrece la oportunidad de ser protagonistas de sus propios procesos de recuperación y adaptación.
Necesidad de crear recursos específicos
Las entrevistas realizadas con informantes clave evidencian la necesidad de crear recursos y servicios específicos para otras formas de trata. Se expone la problemática de la ausencia de recursos y servicios para hombres víctimas, mujeres víctimas de otras formas de trata distintas de la sexual, niños y niñas, personas transgénero, personas con diversidad funcional o intelectual, etc.