Las cifras aumentan año tras año: un 16% más que en 2016 con 198 personas

  • El apoyo integral, basado en sus necesidades individuales, es esencial para la recuperación física, psicologica y social. 60% de mujeres atendidas es muy joven, con edades comprendidas entre 18 – 30 años. Infografía.
  • Se atendieron 231 comunicaciones en relación con posibles casos de Trata de las que 167 se identificaron como presuntas víctimas, siendo atendidas en menos de 3 horas en un 89% de los casos.
  • 91% de las mujeres acogidas han experimentado una mejoría en los 10 primeros días. 15 mujeres accedieron a una beca de estudio y 37 lograron un empleo a través del departamento de inserción sociolaboral.
  • El Departamento Jurídico ha atendido a 126 mujeres víctimas de la trata para facilitarles el ejercicio efectivo de sus derechos, el acceso a la justicia, así como a una situación administrativa regular. El 40% de ellas adquirió estatus legal y 53 de 56 lograron acreditar su identidad.

Madrid,  18 de abril de 2018. El Proyecto ESPERANZA- Adoratrices, que trabaja desde el año 1999 ofreciendo un apoyo integral a las mujeres víctimas de Trata, ha atendido hasta diciembre de 2017 a 983 mujeres de 60 nacionalidades. Proyecto Esperanza ha atendido de forma integral en los últimos 19 años (hasta diciembre de 2017) a 983 víctimas de Trata, de 60 nacionalidades diferentes, adoptando una perspectiva de derechos humanos, intercultural y de género. Nigeria es el país de procedencia que concentra un mayor número de mujeres atendidas por el proyecto, seguido Camerún, R.D Congo, Costa de Marfil, Rumanía y Paraguay.

 Ana Almarza, Directora de Proyecto ESPERANZA añade: “El número de mujeres atendidas en cada uno de los departamentos sigue la tendencia de aumento iniciada en años anteriores. Somos un equipo de 19 profesionales y voluntariado que nos coordinamos de forma interdisciplinar y desarrollamos nuestro trabajo a través de una Red de Recursos Residenciales -casa de emergencia y primera acogida, casa de consolidación, dos pisos de autonomía- y un Centro Día, ubicados en la Comunidad de Madrid. Esta red está conectada con otros recursos asociados, tanto de la propia institución, como de otros organismos, particularmente con la Red de Centros y Servicios para Mujeres de la Comunidad de Madrid, a través de un concierto firmado con esta institución desde al año 2007”.

El Proyecto trabaja en la DETECCIÓN de casos desde una perspectiva de género y de Derechos Humanos: El departamento de IDENTIFICACIÓN ha recibido 231 comunicaciones este año, 43 más que el año anterior, a las que se dio respuesta en menos de 3 horas en el 89% de los casos, a través del servicio operativo las 24 horas los 365 días del año, con un equipo especializado. Han resultado 167 mujeres detectadas como presuntas víctimas. Las derivaciones vienen fundamentalmente a través de las Fuerzas de Seguridad del Estado, ONG´s e Instituciones públicas, como la Oficina de Asilo y Refugio.

Marta González responsable del Departamento de Identificación: “Durante el año ha aumentado de forma significativa el número de mujeres víctimas de trata detectadas en la frontera aérea, en el Aeropuerto de Madrid- Barajas, en el marco de sus solicitudes de asilo. En estos casos el momento de la detección de indicios se produce antes de la fase de explotación en España por lo que muchas veces las mujeres no tienen percepción del riesgo sobre lo que les puede ocurrir en nuestro país y esto dificulta la detección e identificación de los casos”. 

La identificación formal sigue siendo un proceso muy delicado y complejo, en el que aún hay que afianzar el papel de las entidades especializadas, en aplicación de la Instrucción 6/2016 de la Secretaría de Estado de Seguridad, y reforzar una perspectiva centrada en la víctima, garantizado unas condiciones adecuadas que le permitan confiar, relatar su situación y pedir ayuda. Desde el departamento de detección/ identificación se incide en la importancia de seguir manteniendo activas y diversificadas las fuentes de derivación de casos, garantizando la colaboración y coordinación con todos aquellos agentes públicos y privados que pueden llegar a entrar en contacto con posibles víctimas de trata. El Proyecto ofrece un APOYO ESPECIALIZADO e INTEGRAL desde una propuesta que promueve el empoderamiento de las mujeres: El área de intervención directa es el eje fundamental del Proyecto y gira por un lado en torno a la provisión de recursos residenciales (casas de acogida con la cobertura de necesidades básicas), en condiciones de seguridad y dignidad para las mujeres que necesitan un alojamiento, y, por otro lado,  en torno a los servicios de información y apoyo en el ámbito médico, psicológico, educativo, jurídico y socio laboral, ofrecidos desde el Centro Día.

Iris Rodríguez, Coordinadora del Área de Intervención Directa, señala “Atendemos a mujeres que han sufrido gravísimas violaciones de los derechos humanos. Con el apoyo especializado, adecuado e individualizado logran, en la mayoría de los casos, retomar sus vidas y conseguir los objetivos que ellas mismas se han marcado”.

El centro de la intervención del Proyecto Esperanza se basa en una valoración individual de cada caso por parte del departamento de TRABAJO SOCIAL, teniendo en cuenta edad, nivel formativo, situación familiar, experiencia de vida, la situación de violencia y explotación vivida, así como sus fortalezas, logros, objetivos y sueños para proyectarlos hacia el futuro y diseñar un plan de intervención personalizado junto a ella, que le ayude para avanzar en su recuperación. El departamento de trabajo social que ha atendido 148 mujeres, se proyecta a lo largo de todas las fases de intervención directa, desde la identificación hasta la autonomía y va articulándose como enfoque transversal. El 80% de las mujeres logran acceder a las prestaciones económicas solicitadas a la administración pública para ayuda de vivienda. Desde el departamento de trabajo social se trabaja para afianzar el despliegue del programa de trata y asilo, haciendo igualmente accesible el catálogo de prestaciones al resto de las destinatarias.

EL ACOMPAÑAMIENTO EDUCATIVO desempeña su labor desde la igualdad y el respeto a las elecciones personales de las mujeres, partiendo de su decisión de migrar y labrarse un futuro fuera de su país. Se atendió a 69 mujeres tanto en servicios residenciales en sus tres fases de acogida, como en el Centro Día. El 91% de las 46 mujeres que acceden a la I Fase de Acogida y Restablecimiento presenta mejoría en los 10 primeros días. El nivel de ocupación ha sido del 79% a lo largo del año. El domicilio es anónimo y confidencial y en él se cubren las necesidades básicas de las mujeres; alimentación, vestido, transporte, comunicación con la familia, dinero de bolsillo. Desde el departamento educativo el Proyecto quiere seguir potenciando la autonomía y profundizando en la participación de las mujeres en los procesos de acompañamiento entre pares.

Almarza, Directora del Proyecto añade: “En nuestro enfoque a la hora de intervenir con las mujeres partimos que ellas son las protagonistas de su propio proceso para transformar su situación, pasando de ser “víctima” a “superviviente”, evitando la revictimización y acompañándolas en su empoderamiento”.

Desde el departamento de SALUD INTEGRAL se facilita el acceso de las mujeres a un nivel de bienestar en relación a su salud integral que les permita mejorar su calidad de vida. 60 mujeres recibieron apoyo en el servicio de orientación y/o mediación social y sanitaria, así como información y orientación para favorecer una buena alimentación, higiene, descanso y la práctica del ejercicio físico. El servicio Psicológico orienta la atención hacia el logro de su bienestar emocional con terapias individuales y sesiones grupales, el 47% de las 19 que cierran expediente mejoraron su salud psicológica. Desde el departamento de salud, se incide en la necesidad de profundizar en el enfoque de salud integral, promoviendo los espacios de participación social de las mujeres.

El Departamento JURÍDICO facilitó a 126 mujeres víctimas de la trata el acceso a la justicia, así como a una situación administrativa regular, para el ejercicio efectivo de sus derechos. 40% de ellas adquirió estatus legal y 53 de 56 mujeres indocumentadas, un 95%, logran acreditar identidad. El departamento jurídico quiere propiciar la convergencia entre las distintas vías jurídicas que dan acceso a derechos a las mujeres víctimas de trata, particularmente el acceso a la compensación por los daños sufridos. El departamento de Orientación Sociolaboral atendió a 61 mujeres. 15 de ellas accedieron a una beca de estudio, 37 lograron un empleo. El equipo trabaja desde las capacidades y competencias de cada una de las mujeres para mejorar su autonomía en la sociedad de acogida. El departamento se plantea el reto de consolidar el trabajo de inserción laboral desde el marco de trabajo en red nacional con el resto de proyectos de la Obra Social de Adoratrices.

Rodriguez añade: “Hemos afrontando un año de una intensidad y una cantidad de atenciones inusitada. El recurso residencial en su conjunto ha tenido muchos momentos a lo largo del año de un 100% de ocupación y todos los departamentos han visto multiplicado el número de atenciones. Hemos generado nuevos recursos y procesos para dar respuesta a la necesidad de acceder a una vivienda digna por parte de las mujeres que finalizan su proceso de recuperación en el Proyecto y seguimos innovando en algunas claves esenciales tanto metodológicas como en las infra-estructuras”.

El Proyecto considera fundamental seguir trabajando y avanzando para lograr un abordaje integral de la trata de seres humanos en España, de acuerdo con las obligaciones internacionales que tiene el Estado de identificar y ofrecer asistencia y protección a todas las víctimas de trata, con independencia de cuál haya sido el sector de explotación. A lo largo de 2017 el Proyecto Esperanza ha colaborado en 4 investigaciones, ha obtenido 310 Impactos en medios de comunicación, ha participado en 31 actividades formativas a profesionales de entidades públicas y privadas y ha desarrollado 18 acciones de incidencia política y trabajo en red. El Proyecto Esperanza trabaja desde 2012 en el marco del modelo E.F.Q.M. de Calidad y Excelencia, a través de un proceso de revisión, auditoría y mejora continua, y ha logrado este año una evaluación homologada EFQM 300+.

Marta González, coordinadora del Área de Sensibilización afirma: “Es necesario aumentar el conocimiento y la visibilidad de la trata en nuestro país para otros fines de explotación, además de la explotación sexual, como la trata para explotación en el servicio doméstico, en la mendicidad o la trata para la comisión de actos delictivos, para poder dar una respuesta adecuada a todas las víctimas de este delito”.

Antonio Rivas, Coordinador del Área de Gestión incide en la importancia de la TRANSPARENCIA EN LA RENDICIÓN DE CUENTAS, “Seguimos diversificando la captación de fondos para garantizar la sostenibilidad económica del proyecto. De cada 100€ que obtenemos, 83€ se destinan a la atención directa de las mujeres, 9€ a realizar acciones de sensibilización y 8€ a consolidar y conseguir más recursos y oportunidades”.

 

 

 

 

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